¡Hola a todos de nuevo! Espero que el día de hoy amanezcan de maravilla y con los ánimos muy en alto.
El dia de hoy, hablaremos sobre un tema o mejor dicho de un pequeño truquito que practico en mi día a día y que no muchas personas conocen y que es en definitiva bastante útil para todos.
Se que a muchos en algún momento del día, nos ha cogido el estrés, la angustia, alguien o algo nos saco la rabia o nos pone de mal genio, se que probablemente alguna de estas cosas puede suceder varias veces al día o a la semana, ya que todos en nuestro día a día tenemos responsabilidades y cosas de gran importancia para hacer, pero hoy quiero enseñarles a todos ustedes 3 pasos simples que les aseguro les ayudara muchísimo para que logres retomar la calma en esos momentos y puedas tomar control de la situación, de tu mente, tus palabras y tus actos. No hay que olvidar que quienes actúan en un momento de rabia, tristeza o mal genio, por lo general terminan re pensando varias veces el por que hice o dije ciertas cosas en aquellos momentos, ya que como dice mi abuelita "con cabeza caliente no se deben de tomar decisiones" por que los impulsos de rabia no traen buenos resultados para nuestra vida.
Sobra decir, que mientras más tiempo nos dejemos contaminar con la rabia o con aquel detalle que nos choco durante el día, nuestras energías se desgastan inútilmente y lo que reflejamos es lo que sentimos, más rabia y mala actitud.
asi, que sin mas preámbulos aquí están mis 3 simples pero útiles truquitos para aquellos momentos.
En el momento del dia que te suceda lo que mencionamos anteriormente, sea lo que sea que estés haciendo para regalare 3 o 5 minutos de tu tiempo y has lo siguiente:
1: siéntate comodamente y cierra los ojos
2: pon las manos abiertas sobre tus piernas
3: respira profundo, inhalando y exalando despacio, pero en el momento en que exhales, reten un segundo el aire antes de expulsarlo del todo y en esa pequeña bola de aire que tienes en tu pecho mete (simbólicamente) toda tu rabia, estrés o tristezas y exhala con ganas.
repite esto las veces que sea necesario, sin que nadie te interrumpa ni te quite la tranquilidad de esos pocos minutos que te regalas, veras que con estos simples pasos, retornaras a la calma y a la tranquilidad, despejando tu mente y siendo consciente de que quizá hayan cosas en el día que te choquen o que te estrenes pero eres tu el encargado de cambiar el rumbo de las cosas y hacer de ese día un día maravilloso a pesar de todo, solo tenemos que respirar, exhalar la rabia el estrés, pasar la hoja y seguir con una sonrisa grande.
Espero que a todos les sirva mi pequeño truco, en lo personal me es bastante útil y en algunos momentos en que veo que alguna persona lo necesita, como algunos de mis amigos o de mis familiares, los invito a hacer esto junto a mi y liberarlos de aquello que les quita la paz momentáneamente, así que anímate a intentar y compártelo con aquellos que lo han de necesitar.
¡SEAN MUY FELICES Y DEMONOS 5 MINUTOS PARA RESPIRAR!
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